En febrero la producción industrial se expandió 8,5% en comparación con el mismo mes del 2017 y tuvo un crecimiento de 5,1% anual al cierre del primer bimestre, según la consultora Orlando Ferreres. La suba desestacionalizada mensual fue de 1,5%.

El crecimiento de febrero fue superior al de enero en más de seis puntos, lo que según el informe muestra un cambio en las decisiones de paradas técnicas de las diferentes plantas sumado a que la base de comparación con un año atrás es baja.

Tras la caída de enero, el sector de Maquinaria y Equipo (31,6%) fue clave para el nivel de crecimiento industrial de febrero a raíz de los buenos resultados de la industria automotriz (62,9%).

Los sectores de Metálicas Básicas y Minerales No Metálicos (13,6%) mostraron buenos datos por segundo mes consecutivo, en línea con un crecimiento en la actividad constructora.

Mientras la sequía lleva a la mayoría de los analistas económicos a recalcular el crecimiento del PBI para llevarlo a una tasa inferior al 3%, desde el Gobierno se muestran confiados en que, con el auxilio de las exportaciones industriales a Brasil, podrán sostener la expansión de la actividad.

«Este año vamos a estar muy cerca del 3%», dicen fuentes del Palacio de Hacienda. «La sequía va a tener un impacto relevante. Pero en parte se va a compensar por los precios de los granos, que ante la menor oferta van a repuntar, y por otros elementos que no estaban incorporados cuando elaboramos las proyecciones del Presupuesto, como el buen desempeño de las exportaciones industriales. La evolución de las manufacturas de origen industrial en el primer bimestre, que crecieron 20%impulsadas por la recuperación de Brasil, superó nuestras expectativas. Estamos confiados en que este año vamos a tener un buen número de crecimiento de la economía».